La urbanización se convirtió en un autentico reto, puesto que la vivienda se encuentra situado en la ladera de un valle, todos los edificios colindantes están orientados hacia el valle, que es una orientación este, pero con una montaña el frente que impide el soleamiento en los meses más fríos de año. Nuestro reto inicial, era orientar la vivienda para que tuviera las mayores ganancias solares a lo largo del año, con lo que se procedió a girar el edificio con una orientación sur, para optimizar dichas ganancias.
Inicialmente, los propietarios nos indicaron que la parcela era más bien llana, cuando se realizó el levantamiento topográfico, se vió que la diferencia de altura entre el inicio y el final era de unos 6,00 metros, que tenían un caído en oblicuo con respecto a la situación de la futura vivienda. La solución adoptada fue semienterrar el edificio, de tal modo que la planta baja y primera quedaran totalmente abiertas al sur. Se cegó la cara norte que contendría muros de contención para dividir la parcela en dos terrazas llanas en vez de un caído continuo. La segunda planta tiene acceso interior desde las habitaciones a la terraza superior del terreno.
Iván Menéndez Suárez.
EFINCO, S.L.